Su forma y su sabor lo hacen
inconfundible, pero sí son más desconocidas las cualidades y los beneficios que
aporta a una persona que lo consume. El kiwi es mucho más que un fruto verde
con la piel llena de «pelitos». Es uno de los alimentos con más proteínas y,
además, ejerce un efecto rejuvenecedor en la piel.
Muchos expertos aconsejan tomarlo
por la mañana en el desayuno. Comer esta fruta permite mantener las células más
jóvenes, así como reforzar el sistema inmunitario o evitar alergias y
resfriados.
A continuación, exponemos un listado
de beneficios que trae consigo el kiwi, un alimento rico en antioxidantes y
vitamina C.
FILTRA LOS RAYOS SOLARES
Para aquellos que son sensibles a
los rayos UV los más propensos a
quemarse cuando van a la playa el primer día, aun echándose protección 50 no
dudes en comer kiwi. La luteína que contiene ejerce una función de filtro de
protección natural para la piel.
FAVORECE EL SISTEMA INMUNITARIO Y COMBATE LA ANEMIA
Es decir, evita los resfriados y
sube las defensas, gracias a la gran cantidad de ácido fólico y a la vitamina
C. Ambos nutrientes producen más glóbulos rojos y blancos, así como
anticuerpos, que funcionan como barrera de las enfermedades producidas por
virus. También aumenta la absorción del hierro de lo que se consume, lo que
acelera la recuperación de pacientes con anemia.
AYUDA A LA DIGESTIÓN
Es una fruta llena de fibra
soluble, por ello ayuda en la digestión y mejora el tránsito intestinal; es un
gran aliado contra el estreñimiento. Si se consume en el desayuno, ayudará
mucho más en este aspecto.
SIRVE PARA ADELGAZAR Y NO RETIENE LÍQUIDOS
Contiene un gran porcentaje de
agua y un nivel calórico intermedio, lo que permite bajar de peso y sentirse
más saciado. Es perfecto para las dietas de adelgazamiento (es diurético) y
para perder agua, sobre todo en el caso de las embarazadas.
MEJORA LA CIRCULACIÓN DE LA SANGRE Y LOS HUESOS
El kiwi fluidifica la sangre,
mejorando el estado de las arterias y evitando la formación de trombos o
coágulos en los vasos sanguíneos. También permite reducir los niveles de
colesterol en sangre. Además, esta fruta puede mejorar el desarrollo de los
huesos y el funcionamiento de nervios, músculos y órganos.
¿Quiénes no deberían comer kiwi?
Aquellos que son alérgicos a una enzima llamada proteolítica actidina no deben consumir kiwi, papaya o piña. Tampoco los que tienen tendencia a desarrollar cálculos renales (piedras en el riñón). Debido a su contenido en potasio, no se recomienda para los que padecen de insuficiencia renal. Los síntomas por intoxicación pueden derivar en urticaria, problemas para tragar y vómitos.